Aunque parezca una bendición
Bendito sea el Espíritu Santo, que nos advierte, corrige y guía; aunque parezca una bendición los engaños del enemigo, podremos resistir y él huirá
Reflexiona en este versículo
«…¡Hasta Satanás se disfraza de ángel de luz, y también sus ayudantes se disfrazan de gente que hace el bien! Pero al final recibirán el castigo que merecen por sus malas acciones».
2 Corintios 11:14-15 | Traducción Lenguaje Actual
¿Quién va a preferir un desierto a la bendición? Los entendidos en el Señor, siempre le agradeceremos por cada situación, aun las tormentas y desiertos, porque sabemos que después de ellos, nuestra obediencia desatará bendición, pero ¿qué pasa con esas oportunidades confusas que se presentan en medio de la dificultad?
Hablando humanamente, la presión de la adversidad puede llevarnos a considerar que hay situaciones que parecen óptimas para aligerar el camino, el dolor o el peso, y salir más rápido de la temporada, pero ahí es donde se nos advierte que debemos estar alertas y no confundir lo malo con lo bueno, aunque parezca una bendición.
El enemigo es experto en ofrecer maravillas, disfrazar las situaciones, ponernos a hombres “justos” que nos dirán que estafar a tu cliente está bien o que realizar algo a escondidas será lo mejor porque es “una oportunidad de oro”, pero cuidado, porque el medio no justifica la meta.
Pero bendito sea el Espíritu Santo, que nos advierte, corrige y guía; así podremos resistir a cualquier engaño del enemigo y él huirá. ¡Mantén el enfoque en lo que agrada a Dios!
Toma un tiempo para orar
Padre, solo en ti puedo conseguir las herramientas y estrategias para avanzar sin caer en tentaciones o situaciones contrarias. Ayúdame a reconocer lo que viene de ti, quita todo tropiezo de mi camino que me desvíe o me lleve a hacer algo que te desagrade. Te lo pido en el nombre de Jesús, amén
