¿Sabías que estás siendo formado para servir a Dios?
Somos una obra de arte única y original que Dios formó para cumplir su propósito en el tiempo correcto. Por eso, Él planificó cada día de nuestra vida para apoyar nuestro progreso y formarnos a través de los talentos, dones, personalidad y experiencias que tenemos en la vida.
Para ser formados para servir al Señor, es necesario pasar por diversas experiencias en nuestra vida, y estas son:
- Familiares
- Educativas
- Vocacionales
- Espirituales
- Dolorosas
Al respecto, nuestro Pastor Joel destacó que “Dios usa las experiencias dolorosas para formarnos hacia el ministerio, porque el ministerio más grandioso va a surgir de tu dolor más grande. Las experiencias que más te han dejado resentido y lastimando en la vida, las que has ocultado y a veces olvidado son las que Dios quiere que utilices para ayudar a otros”.
Recuerda que cada recurso, personalidad y antecedentes que tengamos no son casualidades sino son la herramienta que el Señor utiliza para su Gloria, así que ten en cuenta que “No le puedes servir a Dios si no tienes una experiencia profunda con Él”.
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