Todos pasamos por esos momentos difíciles en los que no sabemos qué hacer. Venir a Dios y pedir fuerzas en tiempos de crisis, es confiar que Él es nuestra fuente.
Dios puede darnos esperanza en medio de la incertidumbre, pero es crucial recordar sus promesas en esos momentos.
¡Iglesia, no te preocupes por lo que no puedes controlar!, porque Dios tiene un plan para nosotros, aun en los momentos difíciles de nuestras vidas. Y esos planes:
1) Nos dan un futuro de paz.
2) Nunca son para mal.
3) Nos dan una gran esperanza en medio de la crisis.
4) Nos fortalecen en los momentos difíciles.
En Filipenses 4:6-7, el Señor nos dice: “Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.”
Entrégale tus cargas a Dios a través de la oración y mantén la esperanza en Él, para que tu corazón sea fortalecido y renovado en todo momento. Iglesia, recuerda: “¡Mientras más grande es la tribulación, mayor es la gloria de Dios!”
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