Tu familia es tu mayor tesoro.
Somos arquitectos o demoledores de nuestras familias.
No es responsabilidad de la iglesia ni de otros pelear por tu hogar, es tuya, pues Dios te ha entregado este tesoro en tus manos.
Una familia victoriosa, ante cualquier situación, saldrá adelante porque su columna central es Dios.
Una familia victoriosa, ante cualquier circunstancia, defenderá sus convicciones de fe sin importar el terreno.
Una familia victoriosa sabe que su verdadero tesoro es la paz.
Hay 7 columnas que edifican a una familia:
- Temor de Dios
- Inteligencia
- Prudencia
- Justicia
- Ejemplo
- Disciplina
- Armonía
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Al hacerlo te conviertes en un misionero que está propagando el reino de Dios.
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