«Lámpara es a mis pies tu palabra, Y lumbrera a mi camino».
Salmos 119:105 | Reina Valera 1960
Día a día recibimos mucha información: internet, redes sociales, noticias, comentarios en la calle, entre otros. Esto puede agotar nuestra mente y, dependiendo de su contenido, nos cargan, alegran o simplemente pueden afectar nuestras emociones.
En esos momentos no hay mejor lámpara a nuestros pies que la Palabra de Dios.
Su Palabra nos alimenta espiritualmente y nutre nuestros corazones, a través de ella conocemos el corazón de nuestro Padre Celestial y somos guiados por el buen camino que debemos seguir.
Cuando te sientas sin dirección, acude a la Palabra de Dios, ella iluminará tu camino y te guiará a tu destino.
Haz esta oración
Amado Dios, gracias por tu palabra la cual alimenta mi espíritu y me guía por el buen camino que debo seguir. En el nombre de Jesús, amén.
Amado y soberano Dios gracias infinitas por tu palabra que me alimenta día a día gracias por mostrarme que debo ser llena de palabra así como de tu santo Espíritu te alabó te exalto solo a ti amado Dios tú palabra es mi alimento bes mi guía amén amén amén amén amén amén amén amén amén
Sí Padre amado gracias porque no nos has dejado desorientados, sin guía, sin consejo… Gracias porque tu Palabra no vuelve atrás vacía. Padre amado que yo pueda siempre ser buena tierra, y que nada ni nadie pueda arrancar cada semilla que has sembrado en mi a través de tu bendita Palabra, que por ella yo pueda siempre dar fruto, en el nombre de Jesucristo de Nazaret.