«No rechaces, hijo mío, la corrección del Señor, ni te disgustes por sus reprensiones, porque el Señor corrige a quien él ama, como un padre corrige a su hijo favorito».
Proverbios 3:11-12 | Dios Habla Hoy
No es fácil lidiar con la represión o corrección. Naturalmente, pasamos por situaciones en las que somos corregidos porque fallamos en algo. Otras veces, puede suceder, por motivos incómodos e injustos. Pero a pesar del momento, es importante aprender de las críticas que recibimos.
Dios también nos corrige a través de la Biblia. Ella nos muestra las áreas de nuestra vida donde nos equivocamos, debemos mejorar y nos guía a Jesús.
¿Podemos vivir sin ser corregidos? Aunque a muchos le gustaría encontrar una respuesta positiva, la realidad es que no. Debemos entender que estamos en un proceso de crecimiento y formación, donde seremos corregidos por Dios a través de nuestros pastores, líderes y mentores para sacar lo mejor de nosotros.
Estas personas están ahí para apoyarnos, ayudarnos e impulsarnos a acercarnos a Jesús y conquistarnos a nosotros mismos. Dios nos rodea de las personas que necesitamos para crecer.
Haz esta oración
Amado Dios, ayúdame a mantener mi mirada en Jesús. Enséñame a aceptar la corrección con una actitud de amor, silenciando mi boca a la murmuración y abriéndola para dar gracias por mostrarme dónde debo cambiar para ser mejor cristiano, padre, esposo, amigo. En el nombre de Jesús, amén.