El diluvio ha terminado
Las aguas de tu diluvio comenzarán a bajar, hasta disminuir por completo. La paz y el descanso del Señor llegan a tu vida, ¡Él se acordó de ti!
Reflexiona en este versículo
«Y se acordó Dios de Noé, y de todos los animales, y de todas las bestias que estaban con él en el arca; e hizo pasar Dios un viento sobre la tierra, y disminuyeron las aguas».
Génesis 8:1 | Reina-Valera 1960
Todos, en algún momento, hemos atravesado una situación, algo como un diluvio, en la que hemos preguntado al Señor: “¿Por qué no nos dijiste que iba a ser así?”
Los diluvios son lluvias copiosas, abundantes y violentas, que provocan inundaciones y hasta pueden alterar la geografía de manera drástica.
Noé, su familia y los animales, fueron expuestos a este diluvio, lo que vendría a ser para ellos un proceso sin precedentes; esta era una decisión de Dios y tenía una causa: el pecado y la maldad de la gente.
Este proceso no era un azar de Dios, ninguno de sus procesos lo es. El diluvio haría morir la maldad y le daría paso al crecimiento y multiplicación de una nueva generación.
Cuando Dios te quiere hacer crecer, él te hace entrar en el arca, pasar por el diluvio, aunque tú no lo quieras. Nada te puede dar mayor seguridad que estar en la presencia de Dios en el día de la angustia, en el momento del proceso.
Todos los procesos tienen un propósito, todos, sean justos o injustos a tu vista, absolutamente todos tienen propósito. Tu trabajo es ser obediente y permanecer donde él te ha colocado.
Tu obediencia en el proceso, provoca el amor de Dios, Él no se ha olvidado de ti. Y hoy te recuerda que las aguas de tu diluvio comenzarán a bajar, hasta disminuir por completo.
La paz y el descanso del Señor, llegan a tu vida. ¡Él se acordó de ti! No terminarás en el mismo lugar donde comenzó todo ¡Dios te lleva a un lugar más alto!
Toma un tiempo para orar
Padre, yo sé lo que he estado atravesando y viviendo, pero creo que este diluvio está por terminar. Creo que entro en tu reposo. Que se suelta tu unción de descanso, abundancia, crecimiento y paz sobre mí. Comienza una renovación interna en mi vida y mi fe se eleva. En el nombre de Jesús, amén.
Amén. Gracias Padre por tu compañía en mi diluvio,confío que mis aguas bajarán en tú tiempo perfecto y que mi arca terminará en el Ararat que tú has elegido para mí. Te pido, en el nombre de Jesús, que cada día sea más obediente, añadas nueva dosis de fe para seguir creyendo que toda esta alteración geográfica interna que se está generando en mí tiene un propósito divino con crecimiento y multiplicación. ¡Estoy segura de ver el arcoiris después de estas fuertes y copiosas lluvias de situaciones ! 🙌💖