«Nunca dejes de leer el libro de la Ley; estúdialo de día y de noche, y ponlo en práctica, para que tengas éxito en todo lo que hagas».
Josué 1:8 | Traducción en lenguaje actual
Cuando Dios asignó a Josué como sucesor de Moisés, le dio una instrucción clave que le daría el éxito en la tarea que iba a emprender ahora como líder de Israel y así conquistar la tierra prometida.
Esa clave era “estudiar y meditar constantemente en la Palabra de Dios”. Josué debía leer, estudiar y aplicar para de esta manera no solo crecer en conocimiento, sino prosperar en todo.
Quizá te has preguntado por qué las cosas que emprendes no te salen bien y la respuesta es muy sencilla: no has puesto en práctica las instrucciones de Dios a través de su Palabra. En ella encontrarás que Dios tiene pensamientos de bien y no de mal para cada uno de nosotros.
El fruto de la lectura y la meditación de la Biblia es: acción, prosperidad y éxito.
Haz esta oración
Amado Dios, te pido que me ayudes a ser constante en la lectura y meditación de tu Palabra, ponerla por obra para ser prosperado y así todo lo que emprenda me salga bien. En el nombre de Jesús, amén.
Agradezco a Dios por esta palabra pues han sido de gran bendición para mí vida …