Simiente Santa
Hay una savia poderosa dentro de ti: la persona del Espíritu Santo, que te alienta, te levanta y consuela. ¡Dios traerá vida nueva para ti!
Reflexiona en este versículo
«Y si quedare aún en ella la décima parte, ésta volverá a ser destruida; pero como el roble y la encina, que al ser cortados aún queda el tronco, así será el tronco, la simiente santa».
Isaías 6:13 | Reina-Valera 1960
A través de las Escrituras, encontramos relatos de la historia donde se deja ver que el pueblo de Israel sufrió una y otra vez terribles persecuciones por enemigos despiadados y sin pudor; experimentó destrucción en medio de sus ciudades, sus murallas y lo que ellos representaban como pueblo.
En muchas ocasiones fueron conquistados por parte de sus enemigos, tomando su territorio, familias y vidas en esclavitud; sin embargo por la Gracia de Dios, por la simiente Santa que no muere, aún sigue vivo como nación, han perseverado y es como el roble y la encina.
Posiblemente has vivido o estás viviendo una sequía espiritual y te sientes estancado, has dado por muerto tu propósito, tu esperanza, no consigues cómo reanudar tu comunicación con Dios a través de la oración, tu capacidad de vivir en santidad está debilitada; pero hoy, Dios quiere decirte que tú también puedes reverdecer como el roble y la encina, hay una savia poderosa dentro de ti: la persona del Espíritu Santo, que te alienta, te levanta y consuela, y en ese resurgir, Dios traerá vida nueva para ti.
Toma un tiempo para orar
Amado Dios y Padre celestial, en este día te doy gracias por ser tu hijo/a. Hoy proclamo que soy como el roble y la encina, y tú me harás reverdecer. A pesar de todo lo que haya podido vivir hasta hoy, creo que inicia una nueva temporada para mi vida en el nombre poderoso de Jesús, amén y amén.
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